Con gran pesar nos
ha llegado la noticia del fallecimiento del Hno. César. En el último trimestre
del curso el Hno. César no se encontraba bien, se notaba cansado, se daba
cuenta que algo no funcionaba pero no quería desatender la clase y deseaba aprovechar el verano para mirarse,
como se suele decir. Quien le ha conocido sabe que César ha sido cuidadoso y
responsable en su trabajo. Por ello dejó para el tiempo del verano algunas
acciones: retiro espiritual, ir al médico y realizar la visita a su familia.
Como encargado del
albergue de Navalguijo pensaba, para finales de junio, montar las tiendas y
hacerse presente durante el campamento colegial del 29 al 7 de Julio, para
luego ya ir a los médicos. Estuvo presente en el montaje de las tiendas, pero
no pudo estar presente en el desarrollo del campamento. Como en otros años
quería que las cosas funcionaran bien y así los niños disfrutar de ese bonito
tiempo de campamento. Alguna veces, César se revestía de niño y disfrutaba con
ellos “como un enano”; mutuamente se querían.